Microbiota asociada a barnices del desierto y sus implicaciones astrobiológicas
Fecha
2023-09-11Autor
Aguirre-Ramírez, Marisela
Izaguirre, Aldo
151127
López-Mora, Fernando
López-Ruiz, Víctor Antonio
Del Valle Pérez, Paulina
Martínez-Pabello, Pável Ulianov
Colín García, María
Metadatos
Mostrar el registro completo del ítemResumen
Existe una clasificación amplia de rocas que poseen una cubierta exterior con distintas composiciones químicas a la roca parental; en particular las películas micrométricas de tonalidades de negras a rojizas, formadas por materiales arcillosos y óxidos de Mn y Fe se denominan barniz de roca o barniz del desierto [1]. Los barnices del desierto Chihuahuense son del Tipo III, con matrices ricas en óxidos de Fe y Mn, cavidades y no laminados [2]. A la fecha hay pocos reportes relativos a la microbiota asociada a los barnices del desierto mexicano y se desconoce el papel que juega en la formación de estos. En la sierra de Samalayuca, Chihuahua nuestro grupo encontró microorganismos presuntamente oxidantes de manganeso [3]. Recientemente, aislamos 101 cepas de microorganismos, a partir de un triturado de pátina del desierto (20 mg). Estos aislamientos se clasificaron en siete y tres morfotipos de hongos y bacterias, respectivamente. Tres de los hongos resultaron positivos a la producción de óxidos en medios suplementados con Fe y Mn. Por su fenotipo colonial, los grupos identificados corresponden a ascomicetos, líquenes, hongos negros, actinobacterias y proteobacterias. Las misiones Viking, Mars Exploration Rovers (Spirit y Opportunity), Curiosity y Perseverance de la NASA han reportado la presencia de rocas con tonalidades oscuras en la superficie marciana, además de concentraciones altas de Mn que semejan a los barnices terrestres [4,5,6]. En el mundo, todos los barnices del desierto caracterizados a la fecha contienen una microbiota particular asociada, la cual puede preservarse protegida de las condiciones ambientales en el tiempo geológico dentro de las redes arcillosas del barniz. Es por esto que, de existir potenciales barnices en Marte, los recubrimientos terrestres pueden servir como modelo astrobiológico en estudios paleoclimáticos y como reservorio de biomarcadores o vida pasada y presente en el planeta rojo.
Colecciones
- ICB Memoria en abstract [225]